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Movilización en Puerto Madero en reclamo de la «urbanización de las villas»
«Vecinos y vecinas viven en la pobreza, hacinados, con inundaciones, sin cloacas, sin tendido eléctrico, con cortes permanentes de agua, con falta de acceso a condiciones dignas de salud y escuelas colapsadas», expresó una de las referentes de las organizaciones sociales.
Dirigentes y militantes de la Corriente Villera Independiente (CVI) y el Movimiento Popular (MP) La Dignidad se movilizaron esta mañana al barrio de Puerto Madero, para reclamar al Gobierno porteño la «urgente urbanización de los barrios populares y villas de la Ciudad» de Buenos Aires.
Los manifestantes se concentraron pasadas las 11 en la intersección de las avenidas Alem y Corrientes, en la zona del bajo porteño, y desde allí marcharon atravesando Puerto Madero hasta el Casino flotante, ubicado en la avenida Elvira Rawson de Dellepiane sin número, de la Costanera Sur.
«Nos hemos movilizado por el barrio de Puerto Madero, por el corazón de Puerto Madero, como símbolo de la enorme desigualdad que atraviesa la Ciudad de Buenos Aires», informaron voceros de los movimientos sociales.
En ese marco, Marina Joski, referente del MP La Dignidad, expresó: «Marchamos por Puerto Madero porque es donde está la concentración, donde los ricos cada vez son más ricos y los pobres cada vez más pobres».
«Las lujosas torres sin gente crecen y se multiplican como parte de un proyecto de ciudad que privilegia la especulación financiera sobre las necesidades de las personas», remarcó Josky.
Y agregó: «Mientras tanto en las villas, asentamientos y barrios populares los vecinos y vecinas viven en la pobreza, hacinados, con inundaciones, sin cloacas, sin tendido eléctrico, con cortes permanentes de agua, con falta de acceso a condiciones dignas de salud y escuelas colapsadas».
Para la dirigente del movimiento La Dignidad, «los vecinos y vecinas garantizan la limpieza, las obras, trabajan en sus barrios y por sus barrios con enorme dignidad, compromiso, conciencia comunitaria, participación y planificación».
«Es tiempo de reconocer ese trabajo con el incremento de las obras en los barrios que permitan mejorar la calidad de vida y proyectar una ciudad sin desigualdad», concluyó.
