Bienes Raices
Alvear Tower: lujo excluyente en pleno Puerto Madero
El arquitecto Rodolfo Livingston se refirió a este edificio, ubicado a metros del Río y la Reserva Ecológica.
El arquitecto Rodolfo Livingston opinó en el suplemento de Arquitectura de Clarín sobre la Alvear Tower, la torre más alta, lujosa y “excluyente”.
Según Livingston, “la propiedad debiera tener una función social, (así lo establece el pacto de Costa Rica,) y no ser funcional para lo contrario, que es apoderarse de la producción social”. “La torre costará mil millones de dólares. El edificio es “exclusivo”. Excluye”, advirtió.
“Los departamentos más baratos de la torre tienen unos 150 metros cuadrados y cuestan US$ 1.300.000. Sus características son las mismas que las de cualquier buen departamento de propiedad horizontal, no demasiado lujoso: dormitorio principal de 3,40, pasillos en zigzag, cocina de 3,14 metros de ancho. Por ese precio podría esperarse un dormitorio de 6 estrellas, o de 5 por lo menos. ¡Qué diferencia con los ricos de antes! (pensemos en el edificio del Círculo militar o el Palacio Duhau) Las escaleras de incendio parecen responder a las normas, aunque la experiencia obtenida en los cuatro incendios en torres altas ocurridos en el mundo en el 2007 sugieren la escalera excéntrica y no la interior”, analizó.
“Los helicópteros no son aconsejables porque arrojan, con sus aspas, el humo y el aire caliente hacia abajo. Cuando pregunté por el tema en el showroom me contestaron que era “una cuestión técnica” que desconocían. Sin embargo –respondí– los autos se venden con 3, 4 o 5 air bags, y frenos con determinadas condiciones, porque la seguridad es importante. Bajar por la escalera desde el piso 49 no es para todos (aunque yo podría hacerlo y salvar, de paso, a la rubia del piso 38…) En los lujosos folletos, donde –por supuesto– predomina el idioma inglés (kids play room, teens play room, business center, spa de mascotas (¡!), etcétera, se aclara que las medidas de los ambientes son “aproximadas”, pero…¡la torre está en construcción!”, añadió.
“En los departamentos “baratos” (los de más arriba tienen 500 m2 y cuestan 5 millones de dólares), el cuarto de servicio está pegado al cuarto de máquinas, lo cual es antirreglamentario. La mucama, que aunque no sea la dueña, también vivirá en la torre, quedará en penitencia, contra las máquinas…”, conluyó Livingston.